El ajedrecista ruso Anatoly Karpov consideró que el ajedrez debe incluirse en los planes de estudio desde el nivel preescolar, para estimular las habilidades aritméticas y el cálculo mental de los estudiantes.
Durante una conferencia magistral en la Sala Nezahualcóyotl, destacó que en México se tienen proyectos para tal fin y sugirió fomentar su práctica desde ese nivel, ya que los infantes están en plena etapa de descubrimiento de sus habilidades en concentración y cálculo aritmético.
Durante una conferencia magistral en la Sala Nezahualcóyotl, destacó que en México se tienen proyectos para tal fin y sugirió fomentar su práctica desde ese nivel, ya que los infantes están en plena etapa de descubrimiento de sus habilidades en concentración y cálculo aritmético.
"Cuando tenía cuatro años aún sin saber leer ni escribir, el ajedrez me permitió descubrir mis habilidades de cálculo mental y alcanzar el título de campeón mundial más joven", refirió en el acto organizado por la UNAM en el marco de los festejos de sus cien años de fundación.
Aseguró que este juego de mesa es muy útil en el desarrollo de la disciplina, la memoria y es elemental para estimular el raciocinio en la toma de decisiones, lo que explica que muchos países lo hayan incorporado a sus programas de estudio.
A su parecer, el ajedrez permite aprender las bases de las diferentes ciencias, por lo que su difusión y práctica entre niños y jóvenes repercute en la calidad de aprendizaje.
En un comunicado de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) subrayó que esa disciplina no tolera la droga, ni nada que tenga que ver con conductas criminales o antisociales, por el contrario, forja la personalidad y obliga a asumir decisiones.
Karpov lamentó que en la última década los medios de comunicación hayan perdido el interés por difundir los campeonatos o ferias de ajedrez, aunque reconoció los espacios de Internet dedicados a esta disciplina, donde se juegan 400 millones de partidas al año.
Sin embargo, añadió que es necesario impulsar los torneos y las ferias de ajedrez en todas las latitudes del mundo, a fin de ampliar su conocimiento y práctica por sus cualidades como detonador de habilidades aritméticas y conocimiento de la ciencia.
Aseguró que este juego de mesa es muy útil en el desarrollo de la disciplina, la memoria y es elemental para estimular el raciocinio en la toma de decisiones, lo que explica que muchos países lo hayan incorporado a sus programas de estudio.
A su parecer, el ajedrez permite aprender las bases de las diferentes ciencias, por lo que su difusión y práctica entre niños y jóvenes repercute en la calidad de aprendizaje.
En un comunicado de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) subrayó que esa disciplina no tolera la droga, ni nada que tenga que ver con conductas criminales o antisociales, por el contrario, forja la personalidad y obliga a asumir decisiones.
Karpov lamentó que en la última década los medios de comunicación hayan perdido el interés por difundir los campeonatos o ferias de ajedrez, aunque reconoció los espacios de Internet dedicados a esta disciplina, donde se juegan 400 millones de partidas al año.
Sin embargo, añadió que es necesario impulsar los torneos y las ferias de ajedrez en todas las latitudes del mundo, a fin de ampliar su conocimiento y práctica por sus cualidades como detonador de habilidades aritméticas y conocimiento de la ciencia.
Opinión:
Me parece sumamente adecuada la idea de Karpov, pues el ajedrez es un deporte que implica destreza, y eso se necesita despertar en los alumnos, así como las habilidades, y más si se les imparte desde que se encuentran cursando el preescolar, pues es cuando más deseos tienen de aprender y se sienten satisfechos al hacerlo. Otro aspecto que considero importante es la toma de desiciones como lo promueve el juego, pues no hay que olvidar que en la secundaria es cuando los alumnos comienzan a formar su proyecto de vida, aspecto que marcará sus metas y ganas de seguir preparándose a lo largo del tiempo.